Columnas
Después del gran brote de peste porcina africana que ha desestabilizado los mercados mundiales de carne de porcino y la epidemia de la neumonía de Wuhan, que ha sido capaz de alterar las bolsas y el sistema financiero de medio mundo, además del cierre de fronteras al tránsito de personas y productos, ahora se ha declarado un brote de gripe aviar, cerca de foco de Wuhan. Es evidente que China debe revisar profundamente sus protocolos de bioseguridad para tranquilidad de los vecinos que habitamos el planeta tierra y hacer de la sanidad, en general, una prioridad para los próximos años.
Esta situación de emergencia nos devuelve el concepto de one health, una sola salud, como única estrategia multidisciplinar para el cuidado de la salud de las personas, los animales y el medio ambiente, y en donde el trabajo conjunto de investigadores, veterinarios, médicos y otros expertos en sanidad y salud se hace indispensable. Más aun cuando la globalización y el cambio climático están modificando los patrones de propagación que hasta ahora conocíamos de las enfermedades transmisibles.
One health nace, renace diría yo, de las reflexiones y trabajos de dos médicos y un veterinario que entendieron la necesidad de un concepto global de salud, en el 2006. Cada año, cinco nuevas enfermedades potencialmente peligrosas para la especie humana proceden de los animales, incluida la transmisión a través de la cadena alimentaria. Como aparentemente ha pasado con el coronavirus de la neumonía de Wuhan. Y como antes sucedió con la gripe aviar, la rabia, el ébola, la brucelosis, la fiebre del valle del Rift o la influenza. El 60% de los patógenos humanos son zoonosis, es decir, proceden de los animales.
Hoy más que nunca hay que atender con urgencia y de un modo coordinado no sólo a aspectos tan importantes como la seguridad alimentaria o el control de las zoonosis sino también a la lucha contra las resistencias microbianas a los antibióticos, donde solo con una acción conjunta entre médicos y veterinarios se puede controlar uno de los mayores riesgos que tenemos y vamos a tener en los próximos años: la resistencia creciente de microorganismos a los antibióticos sin una alternativa viable de lucha.
No sé, en estos momentos que escribo este pequeño artículo, la evolución que va a tener en los próximos días ni la gripe aviar, ni el coronavirus de la neumonía de Wuhan ni cualquier otro patógeno que pueda surgir. Pero nada es nuevo y necesitamos pensar y actuar como one health. Como el mensaje que transmite el lema del escudo de la profesión veterinaria, desde 1922: hygia pecoris, salus populi. Porque higiene y salud, animales y personas, desde los orígenes, siempre han caminado juntos.