Pensándolo bien...

null EXOPLANETAS HABITABLES

La búsqueda de planetas habitables no cesa y la detección de la presencia de agua es un imperativo de primer orden para tal calificación y viabilidad de la habitabilidad. Hasta la fecha, los astrónomos han identificado más de 5.600 exoplanetas confirmados, de los cuales alrededor de 60 se consideran potencialmente habitables. Estos mundos orbitan en la llamada “zona habitable” de sus estrellas, donde podrían existir temperaturas adecuadas para mantener agua líquida, condición esencial para el desarrollo de la vida.

Nuevas investigaciones sugieren que algunos exoplanetas podrían ser ricos en agua debido a las interacciones tempranas entre atmósferas en formación y los océanos de magma. Los hallazgos tienen importantes implicaciones para la comprensión de los procesos a través de los cuales los planetas rocosos, como la Tierra, pudieron haber adquirido agua y para la búsqueda de mundos potencialmente habitables.

Experimentos de laboratorio liderados por Anat Shahar, de la Institución Carnegie para la Ciencia en Estados Unidos, y publicados en la revista Nature, revelaron cómo se podría crear agua durante el proceso de formación de los planetas subneptunos, el tipo más común de exoplaneta en la Vía Láctea. Se cree que los planetas subneptunos, más pequeños que Neptuno pero más grandes que la Tierra, tienen interiores rocosos con densas atmósferas de hidrógeno. 

Estudios anteriores utilizaron modelos matemáticos para demostrar que el magma y el hidrógeno atmosférico pueden producir agua. Ahora se trata de poner a prueba la teoría con experimentos exhaustivos. Se planteó una nueva fuente de agua para el planeta, pero no existían experimentos diseñados con este propósito. Se recrearon las condiciones de un joven planeta subneptuniano, utilizando hidrógeno para la atmósfera y sílice fundida rica en hierro para el océano de magma. Se calentaron muestras a más de 4000 °C y se comprimieron a unas 600 000 veces la presión atmosférica, (60 gigapascales). Se imitaron las condiciones en las que se forman los planetas rocosos a partir de discos de polvo y gas que orbitan alrededor de estrellas jóvenes.

Al colisionar el polvo y el gas, se adhieren y se funden formando océanos de magma. Estos planetas jóvenes suelen estar envueltos en una densa atmósfera de hidrógeno.  Los resultados demuestran que el hidrógeno reacciona con los silicatos ricos en hierro fundidos para liberar oxígeno, que luego se une al hidrógeno restante formando moléculas de agua. Fue la primera evidencia experimental de dos procesos críticos de la evolución planetaria temprana. El hidrógeno se disuelve en la masa fundida y se crean cantidades significativas de agua por reducción del óxido de hierro mediante hidrógeno molecular.

Sin duda supone un elemento sustancial en la búsqueda de planetas capaces de albergar vida, no considerado hasta el momento presente. Estas conclusiones implican que la formación de agua podría ser un fenómeno común en muchos sistemas planetarios, no una excepción asociada únicamente a la Tierra. Si los procesos descritos son universales, una fracción importante de los exoplanetas subneptunianos podría contener reservas internas de agua o incluso haber evolucionado hacia mundos oceánicos tras perder parte de su atmósfera de hidrógeno con el paso del tiempo. Esto ampliaría considerablemente el rango de planetas potencialmente habitables en la galaxia.

El hallazgo también ofrece una nueva perspectiva sobre la historia de nuestro propio planeta. Si mecanismos similares ocurrieron en la Tierra primitiva, parte de su agua pudo originarse durante la formación del manto terrestre, antes incluso de los impactos de cometas o la acreción de materiales helados. Este escenario sugiere que la presencia de agua en mundos rocosos puede ser consecuencia natural de su evolución geológica, y no necesariamente un evento azaroso.


Imagen creada con ayuda de ChatGPT con DALL-E

Los resultados deben ser corroborados mediante nuevos modelos y observaciones astronómicas, especialmente con telescopios capaces de analizar la composición atmosférica de exoplanetas. Sin embargo, los experimentos ya constituyen un avance fundamental para la comprensión de cómo la química de alta presión y temperatura puede dar lugar a uno de los compuestos más vitales del universo: el agua.

En conjunto, estas investigaciones reconfiguran la narrativa sobre la habitabilidad planetaria. Los mundos con atmósferas densas y océanos de magma, que antes se consideraban demasiado extremos, podrían en realidad ser cuna de agua y, potencialmente, de condiciones favorables para la vida. En la vasta diversidad de exoplanetas descubiertos, los mecanismos que vinculan el fuego del magma con la génesis del agua emergen ahora como un recordatorio de la profunda interconexión entre los procesos cósmicos y los ingredientes esenciales para la existencia.

Sopa de letras: EXOPLANETAS HABITABLES

Soluciones: NUEVO PARADIGMA ENERGETICO EMERGENTE SOLUCIONES