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null ¿Se pueden tener bacterias en el cerebro estando sano?

La microbiota es el conjunto de microorganismos presentes en todos los organismos multicelulares, y la homeostasis es la capacidad de un organismo para mantener un ambiente interno relativamente constante, a pesar de los cambios en el entorno externo. La inmensa mayoría de los microorganismos en todos los animales se alojan en el tracto gastrointestinal. Sin embargo, en los mamíferos, los microorganismos pueden salir del intestino y formar grandes comunidades microbianas complejas en otros órganos, como los ganglios linfáticos o el hígado, aunque la presencia de comunidades microbianas en el cerebro de los vertebrados sigue siendo muy controvertida. No obstante, cada vez hay más evidencias de la existencia de microorganismos en el cerebro humano enfermo, pero no sabemos si existen microbiomas cerebrales durante la homeostasis.

El microbioma es el conjunto total de microorganismos (bacterias, virus, hongos) y sus genes que habitan en un entorno específico, en este caso, el cerebro, junto con todos sus productos. Los peces más evolucionados, los teleósteos, parecen ser organismos especialmente permisivos a la presencia de bacterias en sus órganos internos durante la homeostasis. Por ejemplo, hay bacterias en la sangre y riñones de salmones sanos, aunque todavía se desconoce el significado biológico. Más recientemente, se han secuenciado las comunidades microbianas del bazo de peces, como las tilapias, sanas y enfermas, y se ha propuesto el microbioma sanguíneo como un biomarcador de salud en el fletán.

Esta peculiar relación entre teleósteos y bacterias sistémicas también se ilustra por la total ausencia de una respuesta de shock endotóxico ante la inyección de lipopolisacárido (molécula compleja presente en la membrana externa de las bacterias Gram-negativas), una observación de hace más de 60 años. Estos hallazgos motivaron la búsqueda de bacterias en cerebros de teleósteos en estado de salud y ya hay resultados que demuestran que la trucha posee una microbiota que coloniza directamente todos sus tejidos cerebrales y que posee ciertas señales de adaptación a este nicho tan especial. No obstante, todavía no entendemos las implicaciones fisiológicas de este hecho, pero se ha sugerido que la microbiota pueda regular el cerebro de los peces teleósteos no solo a través del eje canónico intestino-cerebro, sino también mediante la colonización directa de este órgano.

Estos trabajos abren nuevas líneas de investigación que nos lleven a entender la neuromodulación impulsada por la microbiota en peces que se encuentren en sistemas naturales, pero también en especies de peces que son de gran interés para la acuicultura.